“Estamos muy interesados en el MS-21, porque los componentes de los que está hecho lo hacen más ligero, consume menos combustible. Sus motores son estadounidenses, pero esperamos que Rusia tenga un motor suyo, más ligero”, sostuvo Miguel Alemán Velasco presidente del Consejo de Administración de InterJet, después de una reunión con el Ministro de Industria y Comercio de Rusia, Denís Mánturov. El MS-21 viene en dos versiones, el 200 con una capacidad de entre 132 y 165 asientos; y el 300, para entre 163 y 211 pasajeros. La autonomía de estas máquinas se ubica entre los 6 mil y 6.400 kilómetros. El avión ruso tiene, además otra ventaja respecto de sus contrapartes occidentales: es más barato. En definitiva, el MS-21 cuesta entre US$ 70 y 80 millones. Según los precios de lista, los A320NEO cuestan US$ 102 millones; los B-737MAX 8, US$ 93 millones y los Bombardier CS300, US$ 80 millones.
