El vuelo AR1722 de Aerolíneas Argentinas fue el primero en ser recibido, en el Aeropuerto de Iguazú, desde la nueva torre de control. La obra demandó una inversión de 2 millones de dólares y generará un beneficio extra para los 900 mil pasajeros que arriban a la terminal por año, tomando en cuenta que se trata del sexto aeropuerto más congestionado del país. La torre consta de 27 metros de altura, lo que le permite acceder a vista de 360º. Por otra parte, incorpora un equipamiento técnico de vanguardia. Además y en el transcurso del año, se realizarán obras en la pista del aeropuerto y en el edificio terminal, por unos $ 1.000 millones de pesos. Las obras se inscriben en un plan integral de mejora de la infraestructura de 19 aeropuertos de todo el país, con una inversión global que ascenderá a los $ 22 mil millones. “Esta es una muestra más de nuestra apuesta a nueva infraestructura y nueva tecnología, fundamentales para ampliar la capacidad de nuestros aeropuertos. Queremos duplicar la cantidad de argentinos que vuelan y que el sector aerocomercial crezca, generando más trabajo de calidad y mejorando la conectividad dentro del país, para que haya más turismo, una industria estratégica para el crecimiento de la Argentina”, comentó Guillermo Dietrich, Ministro de Transporte.