La Comisión de Cultura, Artes y Comunicaciones concluyó una nueva sesión sin lograr decidir acerca de la posibilidad de cambiar el nombre del Aeropuerto Arturo Merino Benítez, de Santiago de Chile, por el de Pablo Neruda. De hecho, varios legisladores insistieron con su negativa. “Sin duda que Neruda tiene una connotación importante, pero esto es un desaire a alguien que construyó la aviación civil de Chile, no me parece razonable”, comentó el diputado y presidente de Amplitud, Joaquín Godoy. En el mismo sentido, el diputado Jorge Rathgeb (Renovación Nacional) dijo que “a Pablo Neruda se le puede reconocer de muchas formas, colocarle el nombre de un poeta a un aeropuerto es como colocarle a un centro cultural el nombre de un político” (teléfono para el gobierno argentino). Y se sumó al coro el diputado Ignacio Urrutia (Unión Demócrata Independiente) afirmando que “cambiar el nombre a Pablo Neruda o a quien sea tiene un costo y ese costo tiene que asumirlo el Estado. En algún minuto lo van a declarar inadmisible, salvo que mantengamos el nombre de Arturo Merino Benítez y nombremos a las terminales, eso no tiene costo y eso sí tenemos atribuciones para hacerlo”
