La aerolínea australiana aplaudió la decisión del Gobierno de Australia de permitir una mayor participación extranjera en la compañía, pese a reivindicar que se eliminaran las limitaciones por completo. «Si bien preferimos que se eliminen todas las restricciones que solo se aplican a Qantas para poder nivelar el terreno de juego, el cambio de los topes de 25 % y 35 % representan una mejora en nuestro status quo», indicó la empresa en un comunicado. El Gobierno pretendía eliminar las restricciones contempladas en la Ley de Venta de Qantas, que limita la participación foránea a un 25 % para un único inversor o un 35 % en el caso de una participación combinada de aerolíneas extranjeras. La resistencia del Senado obligó al Ejecutivo a rebajar sus planes, y a acordar con la oposición, el mantenimiento de un tope que evite que más de un 49 % de la propiedad de la aerolínea pase a manos extranjeras. Según Qantas, aerolíneas como Virgin -que tiene a Singapore Airlines, respaldada por el Estado, como principal accionista- Air New Zealand y Etihad se apoyan en capitales financieros para fijar precios con los que no puede competir en Australia.
