Según surge de un informe de la Auditoría General de la Nación (AGN), con los recursos que el Estado le transfirió a Aerolíneas y Austral desde la estatización de las empresas, “el país podría haber comprado dos veces todos los activos de ambas firmas, sin pasivo o deuda alguna”. La estimación surge de comparar los más de 9.000 millones de pesos transferidos por el Tesoro hasta fin de 2011 y los activos de Aerolíneas y Austral que sumarían 4.400 millones. El dato lo aporta un trabajo del organismo de control que preside el radical Leandro Despouy al que tuvo acceso El Cronista Comercial, basado en los balances anuales del ejercicio 2011 de las aerolíneas. Según la AGN, durante 2011 Aerolíneas y Austral facturaron 6.143 millones de pesos argentinos, «ingresos insuficientes para cubrir los gastos de funcionamiento e inversión por lo que se requirieron ingentes aportes del Estado. Dice, además, que “en base a la previsión del crédito fiscal para el impuesto a las ganancias en ejercicios futuros que surge de las pérdidas acumuladas bajo la forma de activo diferido contenida en los informes de la empresa, el organismo advierte que Aerolíneas no prevé que haya utilidades en esas dos compañías al menos por un quinquenio, es decir hasta 2017». El informe concluye que las empresas “no pudieron cubrir siquiera los gastos operativos”.
