Mientras medios aeronáuticos y de la propia empresa especulan sobre la salida de Mariano Recalde de la presidencia de Aerolíneas para intentar ocupar una banca de diputado a partir de octubre, los últimos datos sobre transferencias de fondos hacia la compañía indican que en cuatro meses consumió el 41% de los subsidios previstos para todo el año. Entre enero y abril la empresa habría devengado $ 1.466 millones de pesos (U$S 277 millones a cambio oficial) sobre un total previsto para todo el ejercicio de $ 3.598 millones (U$S 681 millones). A este ritmo, según elauditor.info, Aerolíneas podría agotar hacia fines de octubre la totalidad del subsidio previsto lo que llevaría a suponer que también este año, en el que teóricamente se iba a autofinanciar según manifestaron sus autoridades en el Congreso a fines de 2011, se deberá recurrir a una nueva reasignación de partidas hacia la línea de bandera. Algo similar ocurrió el año pasado cuando comenzó el ejerció con un crédito inicial de $ 2.489 millones pero terminó demandando $ 3.493 millones, es decir un 40%, más de lo previsto
