El fabricante de motores británico Rolls-Royce reportó un alza de 24% en su ganancia anual, liderada por su unidad de aviación civil, y dijo que no espera que los problemas que han dejado en tierra los aviones Dreamliner de Boeing generen impacto en las utilidades. La compañía, que fabrica los motores Trent 1000 que impulsan a algunos de los B787, dijo que la suspensión de los vuelos comerciales de 50 jets cuyos sistemas de baterías están en revisión, no golpearía los resultados. «Boeing continúa su producción, así que no, esto no nos impactará y estoy confiado en que Boeing superará los problemas pronto», dijo el presidente ejecutivo John Rishton. El grupo reportó una ganancia subyacente antes de impuesto récord de U$S 2.180 millones en 2012. Los ingresos de su negocio aeroespacial, que representan casi la mitad de las ventas del grupo, subieron 16%, ayudados por una fuerte demanda de motores con uso eficiente de combustible para aviones fabricados por la europea Airbus y su rival estadounidense Boeing.
