Recién en 2023, la australiana Qantas pondrá en funcionamiento los vuelos más largos del mundo, que son aquellos que unen Sídney con Londres y Nueva York. Esta es la consecuencia del denominado Proyecto Amanecer que planteaba realizar un vuelo de entre 18 y 21 horas sin escalas. Por el momento, Qantas negocia con Airbus la compra de 12 aviones A350/1000 y también dialoga con los sindicatos de piloto, para lograr su apoyo en la realización de los vuelos. Lo que trascendió, además, que, tras Londres y Nueva York, se implementarían vuelos también a París y Fráncfort, y luego Ciudad del Cabo y Río de Janeiro.
